No podía ser casualidad. Cuando finalmente se empezaba a cerrar un misterio aparecía otro. Así, entre dudas crecientes, murmullos inseguros y noticias supersticiosas, el 31 de marzo de 1993, moría Brandon Lee, con apenas 28 años. La casualidad quiso que fuera el hijo de Bruce Lee. La casualidad quiso que fuera, al igual que este, en el transcurso de su cuarta película. ¿La casualidad?
A veces las situaciones más comunes nos hacen sospechar y las más insólitas pasan desapercibidas. El trágico accidente levantó el polvo de las supersticiones que giraron, naturalmente después, alrededor de la trama de la película donde hechos aislados como un accidente que sufrió un integrante del equipo de filmación durante el rodaje empezaron a tener otro sentido.
Otra vez, cuando todavía costaba creer que Bruce muriera por naturaleza, volvía a correr la voz inquietante de una trama familiar oculta con la mafia china y los maestros de las artes marciales. ¿Casualidad o ajuste de cuentas?
En este caso vamos a limitarnos a los hechos. Se está filmando la película El Cuervo (The Crow) y en la escena de uno de los flashback de Eric Draven, el personaje que interpreta Brandon Lee, el villano Fun Boy, interpretado por el actor Michael Masse, le dispara a Brandon.
Para esta escena, Brandon recibe las indicaciones de caer de rodillas hacia delante para darle más realismo. Parece ser que al cargar el arma, un mágnum 44, se quedó dentro una bala verdadera de las que se habían usado en una escena anterior que no tenía riesgo, un terrible error. Cuando Masse dispara, Brandon cae hacia atrás, a pesar de las órdenes, con dificultad llega a gesticular “cut”, la escena se da por buena pero algo va mal. Brandon no se levanta.
La bala entró por su abdomen se alojó muy cerca de la columna. En el Hospital New Hanover Regional Medical Center de Carolina del Norte, luego de algunas horas y varias intervenciones de emergencia, Brandon finalmente muere.
La cinta de la escena real es destruida y Brandon es enterrado junto a Bruce en Lake View de Capitol Hill, en Seattle.
Su muerte terminó por levantar definitivamente el velo que fue cubriendo durante algunos años los crecientes cuestionamientos sobre la misteriosa muerte de su padre y echó más argumentos para su leyenda. Casualidad o no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en nuestro blog...